El domingo 9 de octubre de 2022 será proclamado santo el beato Giovanni Battista Scalabrini,
en la Basílica de San Pedro, durante el Consistorio ordinario, el Papa Francisco anunció la
fecha en que el Obispo de Piacenza, fundador de la Congregación de las Misioneras de
San Carlo Borromeo y de la Congregación de las Hermanas Misioneras de San Carlo Borromeo
Scalabriniane e inspirador, será canonizado de los Misioneros Seglares Scalabrinianos.
Scalabrini nación en Fino Mornasco, en la provincia de Como en 1839. El Beato hasta hoy es
un regalo para la Iglesia y la humanidad: un hombre enamorado de Dios y del misterio de la
Encarnación. Profundamente conmovido por el drama de tantos italianos obligados a emigrar a
Estados Unidos y Sudamérica a finales del siglo XIX, no se mostró indiferente.
Ante ello, se documenta, sensibiliza a la sociedad y envía a sus misioneros por todo el mundo
para ayudar y apoyar a los emigrantes en los puertos, en los barcos y al llegar a nuevos países.
Por lo tanto, es considerado un padre para todos los migrantes y refugiados.
Más de un siglo después de su muerte, su legado aún da frutos: su obra está presente en 39 países,
miles de religiosos y laicos scalabrinianos siguen sus pasos y sirven en parroquias, hogares para
migrantes, escuelas, orfanatos, en los hospitales, en los cuerpos eclesiales de las Conferencias
Episcopales y diócesis, en los centros de estudio, en los puertos y en las fronteras del mundo entero.
“Scalabrini fue un obispo que se dedicó por completo al ministerio en la diócesis, pero también
supo mirar más allá de aquellos que se vieron obligados a abandonar su tierra”, comenta el
Padre Leonir Chiarello, CS, Superior General de los Misioneros de San Carlo.
“Dio una respuesta concreta al fenómeno de la migración, involucrando a la Iglesia, al Gobierno,
a la sociedad y llamando a todos a tomar conciencia. Luchó contra lo que el Santo Padre llama
'la cultura de la indiferencia y el rechazo'.
Fuente www.scalabrinisanto.net
