En el marco del Día Mundial del Refugiado, que se celebra el 20 de junio, la Misión Scalabriniana ha preparado una actividad de conmemoración en el barrio San Francisco, reconocido como referente en el trabajo de barrios inclusivos.
Este evento, que forma parte de la cuarta vigilia organizada en la ciudad, tiene como objetivo brindar homenaje a las personas refugiadas y desplazadas, reflexionar sobre su situación, y promover un mundo más inclusivo y solidario.
La vigilia iniciará con un espacio de reflexión sobre la realidad de las personas refugiadas, destacando su resiliencia y la búsqueda de un futuro mejor. A través de oraciones, mensajes y presentaciones artísticas, se rendirá homenaje a quienes han sido forzados a huir de sus hogares debido a conflictos, persecución o violencia.
Contaremos con la participación de niños y niñas gestores, quienes exhibirán al público una presentación de coro. Además, se presentará una obra de teatro al aire libre que abordará temas relacionados con la migración y la búsqueda de un nuevo hogar.
También se realizará un encendido de velas, donde los participantes podrán expresar sus deseos y peticiones para el futuro. Esta acción simbólica representa la esperanza de que todos podamos vivir en paz y seguridad como comunidad.
La vigilia culminará con una cena comunitaria, donde se compartirá un espacio de fraternidad y diálogo entre los asistentes. Esta cena representa la unión y el apoyo que las comunidades pueden ofrecer a las personas refugiadas, brindándoles un sentido de pertenencia y acogida.
El barrio San Francisco, reconocido por su labor en la construcción de comunidades inclusivas, se convierte en el escenario ideal para conmemorar el Día Mundial del Refugiado. Su compromiso con la integración y la solidaridad refleja el espíritu de esta fecha, donde se busca promover un mundo donde las personas refugiadas puedan rehacer sus vidas y contribuir positivamente a sus comunidades de acogida.
Invitamos a toda la comunidad de Ibarra a participar de este entorno comunitario y de celebración, donde se dará la oportunidad para reconocer a las personas refugiadas, reflexionar sobre su situación y unirnos en la construcción de un mundo más inclusivo y solidario.